Tu Energía, Tu Calidad de Vida.

Nuestra calidad de vida comúnmente es relacionada con nuestros ingresos económicos, sin embargo, se deja de lado una de las partes más importantes, la psicológica y emocional.

Todo lo que hacemos nos genera energía, nos puede hacer sentir mejor o peor. Por ejemplo, si discutes con alguien probablemente sientas cierto malestar, pero si recibes un cumplido recibes esa energía, del puro impacto emocional que te da, ahora imagina el conjunto de acciones durante el día, la semana, el año, la vida… vivirá muy distinto quien tiene un ambiente nutritivo a quién enfrenta uno de estrés constante.

Somos los principales creadores de nuestra atmosfera. Si bien existen cosas que salen de nuestro control, nosotros al volvernos conscientes de que todo lo que hacemos genera cierto tipo de energía podemos elegir qué comenzar a proyectar y reforzar en nuestras vidas.

Cuando ayudamos a las personas y hacemos cosas sanas para nosotros mismos obtenemos energía positiva al instante y eso si lo adoptas como una constante en tu vida se va expandiendo pues eso es lo que sembraste tanto en ti como en las personas, buena energía, buena voluntad.

Hemos de hacernos conscientes de que el ayudar a las personas y el tener hábitos que nos demuestren amor hacia nosotros mismos es nutrición emocional que nos mantendrá sanos tanto física como emocionalmente y esto se traduce en una calidad de vida completa.

¿Quieres hacer un experimento? Comprueba cómo te sientes por ejemplo con los siguientes snacks emocionales:

1. Darle un cumplido sincero a alguien y ver la sonrisa que le generaste.

2. Pagarle el café a la persona formada detrás de ti.

3. Escribirle o llamarle a algún amigo que hace tiempo no ves y decirle que te acordaste de él y que le aprecias.

4. Dar los buenos días y sonreír sinceramente.

5. Llevarle un chocolate o algún detalle a alguien que te atiende seguido en alguno de los lugares que frecuentas.

6. Ayudar a alguien desinteresadamente.

7. Etc… Existen infinidad de ejemplos que se te pueden ocurrir donde puedes impactar positivamente en las personas y a tu atmosfera y por consecuencia a ti mismo.

No nos podemos ni imaginar el tipo de sociedad que podemos tener si las personas comienzan a sanarse interiormente y a despertar a esta nueva realidad; hacer el bien y ayudar a las personas es una fuente inagotable de salud emocional y de felicidad.

Por Eduardo Cid