Los destructores de relaciones

Como sabemos, las relaciones de pareja no siempre son fáciles, existen muchas teorías de cómo mantener una relación sana, pero en concreto ¿qué cosas son las que realmente dañan una relación?

Independientemente de la compatibilidad, el carácter y demás requisitos que creemos que necesitamos para que funcionen las cosas en mi opinión las cosas son simples y somos nosotros quienes las complicamos, no importa si son de carácter similar o muy distinto, si hay una voluntad autentica de estar juntos, es posible, si es que eso existe en las dos partes.

Todo lo que hacemos cuando estamos en una relación o bien la nutre o la desgasta y está en nosotros elegir qué tipo de cosecha estamos sembrando.

Entonces si es algo tan sencillo de identificar ¿qué son esas cosas que dañan las relaciones?

Algunas resultaran muy obvias mientras que otras tal vez no tanto...

Mentiras.

No es una sorpresa pero incluso las más pequeñas dañan la confianza y dependiendo su naturaleza pueden hasta romper por completo una relación, simplemente porque para poder amar realmente a alguien necesitamos poder confiar en esa persona, si un integrante de la pareja miente u omite cosas importantes está restando a su relación y esto es algo de lo que realmente necesitamos estar conscientes, pues suena muy obvio pero a veces no se tiene la noción de la enorme fuerza negativa de cualquier tipo de mentira por más pequeña que sea.

Falta de atención.

No solo las relaciones sino todo lo que permanece en nuestra vida se da gracias a la atención que le demos y no solo eso sino la calidad e atención que tengamos, alguien que está ausente, que no comparte, que no se abre y que simplemente no procura a su pareja en definitiva la está empujando fuera de su vida, puede que en ocasiones no sea a propósito, pero si es algo que se está dando es importante comunicarlo y sobre todo atenderlo y mejorarlo.

Dar por hecho a la otra persona.

En ocasiones las personas pueden caer en una zona de confort, cosa que no está mal en si pues tampoco se puede estar haciendo algo excitante o interesante todo el tiempo simplemente hay que tener en cuenta que el cariño y el hacerle saber a nuestra pareja que la queremos y que es importante para nosotros siempre debe estar, incluso frente a la rutina, la actitud que tengamos con nuestra pareja hace la diferencia, hay veces que uno es muy afectivo y el otro da por sentado esto y es algo que debe nutrirse de ambas partes pues una relación es de dos y no puede ser solo mantenida por un integrante, si no hay respuesta eventualmente comenzaran los problemas.

Creer que debe ser asombroso (por lo menos al principio).

Hay quién cree que cuando se está con la persona adecuada todo por arte de magia es maravilloso, son compatibles, piensan igual y no tienen de que quejarse, la verdad es que no tiene por qué no serlo pero en ocasiones requiere una intención de ambas partes de estar bien, incluso personas con personalidades e ideales muy distintos puede estar juntos sanamente, la clave es que haya voluntad de ambas partes, que exista ese cariño por la otra persona, sino cualquier excusa será buena para creer que no es la persona o momento adecuado.

Puede que una relación sea difícil por adaptación y tal vez no hayan encontrado ni siquiera al principio ese estado de felicidad, pero la clave es ver que se está por lo menos avanzando y poco a poco cada vez irse conociendo y entendiendo mejor, si es algo que ambos quieren cada reto de adaptación será una oportunidad para estar cada vez mejor, se necesita esas ganas de entenderse y comunicarse y eventualmente llegaran a ser una feliz y fuerte pareja.

Creer que los malos entendidos son hechos.

Cuando dos personas realmente se quieren y tienen buenos valores me parece que los problemas realmente son solo malos entendidos o falta de comunicación y es muy importante verlos así, pues cuando alguien entendió algo que no es, pues no es, tu pareja no fallo simplemente se mal entendió, el problema viene cuando vemos esa falla como real en la otra persona.

Un ejemplo random, si en una situación uno piensa que su pareja lo dejo abandonado cuando quedo de pasar por él/ella antes de saltar a conclusiones ver que paso, resulta que el otro se quedó sin pila del celular y estuvo esperando en una dirección incorrecta y para cuando se pudo comunicar la otra persona ya estaba en casa enfadado creyendo que a su pareja no le importa.

Al momento de hablar hay que saber dejar atrás los malos entendidos, no etiquetar pues si no se deja atrás saldrá a relucir de nuevo y solo se seguirán buscando escenarios para confirmar una creencia negativa adoptada e irreal pero que la hacemos real en nuestra mente y así comienza a desgastarse la relación (y con esto me refiero cuando realmente son malos entendidos, personas mentirosas o indiferentes que realmente no les importa creo que es evidente la diferencia y el cómo proceder depende de si esa persona está dispuesta a mejorar o no).

Creer que la rutina es mala.

Generalmente somos personas normales con vidas normales, me parece no es muy realista la expectativa de tener una relación donde todo el tiempo se hacen cosas emocionantes, al principio que se están conociendo es común que se realicen muchas cosas distintas pero eso en la vida real no es sostenible ni me parece muy sano tampoco, a su vez creo que una persona que realmente te quiere estará feliz de estar contigo simplemente por pasar tiempo a tu lado sin necesitar nada más, claro que eso no está peleado con realizar planes de vez en cuando, pero sí creo que necesitamos entender que la rutina forma parte de la vida de todos y el aceptarla, acogerla e incluso aprender a disfrutarla con tu pareja puede que sea una de las claves más importantes de las relaciones duraderas y la rutina nada tiene que ver con perder el interés por tu pareja, cuando hay amor eso se nota y siempre recordar que es algo que se nutre de a dos por igual.

No saber solucionar problemas.

Creer que si hay muchos problemas esa persona no es para ti, los problemas se presentan y es necesario tener una mente enfocada en soluciones, claro que me refiero a problemas ya sean exteriores, de entendimiento o circunstanciales (nada tiene que ver con maltratos, indiferencia, abusos o engaños cosa que a mi parecer alguien que se respeta no tiene por qué estar soportando) no darle tantas vueltas a las cosas, ver que se puede hacer, aclarar si es un mal entendido y querer mucho a tu pareja pues solo si es un sentimiento genuino habrá apertura a superarlos.

Frivolidad.

Tener intereses no auténticos por la persona, querer a alguien solo por interés material, solo por su físico, por sus logros, reconocimiento, poder o lo que puede llegar a ser y no por su persona en sí, esto es de los principales destructores de parejas pues cuando no es un sentimiento autentico cuando se presente la escasez o alguien con "más" en cualquier área del ego exterior (que siempre hay) se romperá, claro que tu pareja te debe de gustar y que haya atracción solo toma en cuenta que (a mi parecer) los valores son lo más importante en una persona pues sin estos todo lo demás con el tiempo eventualmente pierde relevancia. Personalmente cuando quiero estar con alguien me importa menos que nada lo que tenga o no tenga, simplemente me interesa estar con la persona y salir adelante juntos sin importar el escenario que tengamos.

Indiferencia.

Alguien que de vez en cuando te busca, que cualquier detalle es suficiente para dejarte de hablar, ante cualquier circunstancia negativa quiere abandonar. Esta actitud por cuestiones de ego emocional puede crear cierta atracción hacia la otra persona de querer probar que es deseable por su pareja pero si se mantiene esta actitud, esta cansará, sin mencionar que la indiferencia es uno de los peores tipos de violencia, esto no es algo que se le hace alguien que supuestamente se quiere, me parece que si alguien experimenta algo así, necesita comunicarlo a su pareja y si persiste pues... si a alguien no le es importante verte y estar contigo en definitiva estás perdiendo el tiempo.

Creer que las personas son desechables.

Este mal aqueja bastante a las generaciones jóvenes, está muy de moda que todo es una razón para etiquetarlo de tóxico, no hay apertura ni tolerancia a comunicarse activa y eficientemente y si alguien no te da gusto en todo es desechable, no estoy diciendo que se tolere algo que te está dañando sino que se aprenda a diferenciar cuando tienes a alguien valioso en frente, nadie somos perfectos y tenemos cosas que mejorar, me parece que cuando hay valores y un cariño autentico vale la pena luchar por esa relación, recuerda que para tener una relación sana y duradera se necesita madurez de ambas partes y saber solucionar las cosas, dejar los berrinches y caprichos son parte fundamental para permanecer juntos y tener a tu lado a personas realmente valiosas que si no se tiene esa noción se la viven saltando de relación en relación y se puede dar el caso que cuando quieren realmente formalizar si es que su falta de apertura no los hace optar por quedarse "orgullosamente" solos o con relaciones que terminan siendo básicamente anti-soledad.

No darle prioridad a tu pareja.

Que tu pareja no sea tu prioridad realmente envenena mucho las relaciones, todos merecemos la atención y prioridad de nuestra pareja, si no se tiene, eventualmente comenzaran los problemas y si no se resuelve se romperá, incluso si no fuera el caso se empieza a vivir en un ambiente muy triste que genera muchas dolencias emocionales y por consiguiente poco satisfactorias como pareja.

Falta de consideración y comunicación

Hay situaciones laborales y sociales que requieren buena comunicación y ser considerados poniéndonos en los zapatos de nuestra pareja. Puede sonar a cosa de niños, pero es importante recordar que nuestros sentimientos son muy sensibles a lo que haga nuestra pareja.

El avisar cuando se es pertinente al estar en situaciones sociales o laborales que si no se comunican bien pueden restar a la confianza como lo son eventos, compañías de terceras personas, actividades específicas que puedan malinterpretarse. No es que sea necesario estar reportándonos todo el tiempo sin embargo es un hecho que son muchos los problemas que nacen de no avisar y que con el puro gesto de notificar o comunicar damos la confianza que no tiene por qué ser un problema; hay quienes dicen que si hay confianza no hay por qué avisar nada pero en la práctica cuando es al revés no es particularmente agradable, me parece un detalle tan sencillo como avisar no tiene nada de malo en ocasiones pertinentes las cuales me parece es evidente qué tipos de eventos y personas con las que estemos requieren una atención de nuestra parte como forma de consideración y para evitar malos entendidos y me parece que cuando realmente quieres a alguien no es algo que te cueste trabajo.

No hacerla parte de tus planes.

Erróneamente hay quienes piensan que el compartir su vida con alguien es el fin de la libertad y la autorrealización, cuando se está con la persona adecuada realmente eso es todo lo contrario pues se potencializa y se disfruta más. Cuando aparentemente todo está bien pero un integrante tiene muchos planes y en pocos o ninguno forma parte de ellos la otra persona puede generar desgaste en la relación y esto no está peleado con tener proyectos individuales o buscar ciertos objetivos, todo se puede lograr con comunicación y mostrando el interés y las ganas de que quieres que la otra persona forme parte de tu vida, cuando uno planea y le da igual lo que piense el otro me parece no hay un interés real por la otra persona, es muy evidente cuando dos personas se quieren y desean estar juntos.

En esta ocasión se tocaron puntos que en ocasiones son sutiles, todos podemos fallar en alguno, lo importante es reconocerlo y siempre estar abiertos a mejorar, demostrar que nos importa estar con nuestra querida pareja, que queremos realmente hacerla feliz y que si bien podemos fallar, tener la humildad para ambos abrirnos a solucionar y salir fortalecidos de cada reto.

No se tocaron temas de maltratos, engaños y abusos pues me parece no hay mucho que decir pues esos por descontado no son parte de ninguna relación que se pueda llamar realmente relación de pareja.

Haciéndonos conscientes de los males podemos elegir distinto y de mejor manera cuando se presenten, merecemos tener relaciones felices y satisfactorias y eso se logra sabiendo también navegar durante las tormentas y eso nos hace siempre más fuertes.

Queramos mucho a esa persona tan especial, demostrémosle cuán importante es para nosotros e intentemos siempre alegrarle el corazón pues eso es algo que regresa y que nos nutre, dar y recibir cariño es lo mismo y como prueba, así se siente cuando lo ejercemos, para quien tiene la dicha de tener a alguien especial a su lado, la vida es muy corta para no disfrutar desde ahora la maravilla de quererla, llenar tu casa de alegría y amor que aunque suene cursi, es real y se experimenta en carne propia cuando nos abrimos realmente a vivir ese tipo de realidad mágica con nuestra pareja.

Recuerda que todas nuestras acciones cuentan y podemos elegir si suman o restan a nuestra relación, que sumen.

Por Eduardo Cid