Nadie me ha hecho daño jamás

Cuantas veces no nos hemos sentido agredidos y a la vez hecho daño a alguien por reacción o involuntariamente.

Entender que nadie nunca nos ha hecho daño parece ser algo inimaginable si el ataque y la defensa pareciera ser algo casi cotidiano.

Cuando comprendes que nunca es personal, que cada persona actúa bajo su propia percepción te das cuenta que lo que sea que te haya hecho no fue en si a ti...

Todos tenemos ciertos "programas" en nuestra psique que rigen nuestra vida, las personas que se van volviendo más conscientes logran comenzar a trascenderlas y si todos las trascendiéramos llegaríamos a nuestra esencia real, la cual es pura e invulnerable.

Tomando eso en cuenta podemos entender que toda agresión es un tipo de síntoma de una condición psicológica de cada persona y si nuestra verdadera esencia es pura podemos entender que la verdadera persona no nos puede hacer daño sino simplemente sus programas, por lo tanto, esa intención "dañina" no es real, pues no es la voluntad real de la persona.

Por ejemplo, alguien enfermo no puede controlar los síntomas de alguna enfermedad hasta que sea curada.

Esto no quiere decir que tengas que soportar y rodearte de personas que te hagan sentir mal, simplemente se trata de tomar consciencia que en si no te están atacando a ti si no que es un estado interno de cada persona y por lo tanto no es personal sino que puede que tu personalidad o algo de tu comportamiento puede que le represente algo que dispare cierto programa en alguien y por eso pueda parecer personal contigo, pero es solo percepción, se dice que vivimos en el mundo de la ilusión por que todo es percepción y con solo un pensamiento podemos cambiar nuestro mundo por completo.

El verdadero perdón recae en esto, que no hay nada que perdonar pues nunca ha habido ataque realmente contra nadie, simplemente consecuencias de condiciones y programas en la psique de las personas que no son diferentes a las de una enfermedad y que más que odio merecen sanación.

Tu única labor es comprender esto, no tienes que estar con alguien que te hace daño ni tienes que intentar cambiar a alguien, hay personas que tienen sus programas muy arraigados, con tu simple comprensión y consciencia de no posicionamiento estas colaborando con la sanación (que suerte que no hay que intentar cambiar a nadie), pues con este simple hecho ya no estas reforzando la culpabilidad y eso es un aporte enorme.

Las personas más agresivas y violentas que más daño hacen a la sociedad probablemente hayan crecido en ambientes hostiles, escasos y de abandono y ese es el programa que rige en sus vidas, de separación y violencia, lo mismo para las personas corruptas y abusivas que aceptaron un programa de división y soberbia donde ingenuamente creen que tener más es valer más, nuevamente son estados de consciencia de separación, la violencia puede tener muchas formas unas más sutiles que otras y como todo enfermo más que castigo requieren de curación.

Lo que sembremos hoy es lo que cosecharemos en el futuro. Sembremos paz en los corazones de las personas comenzando en nuestro hogar.

La clave de una mente sana es lograr perdonar y soltar los resentimientos, esto nos libera de las cadenas más pesadas que condenan a la raza humana, comúnmente no se tiene noción de la inmensa salud que conlleva el perdonar, es un estado de gracia que afecta toda nuestra experiencia humana impactándonos positiva y profundamente tanto emocional como físicamente.

Nota: Comprender esto no quiere decir que dejemos de ser humanos, igual te puedes sentir ofendido e incluso reaccionar, pero conforme vamos avanzando en la toma de consciencia iremos mejorando nuestro trato en el día a día, estamos todos juntos en esto...

Por Eduardo Cid