La trampa de la insatisfacción
La insatisfacción es un común denominador de gran parte de las personas en nuestra sociedad actual, sin importar que tan "exitosas" sean, siempre se necesita algo más para estar bien y esa rueda parece nunca acabar.
Estamos constantemente necesitando y persiguiendo objetivos para lograr la idea de una vida satisfactoria, si bien el tener metas en la vida es algo positivo esto se vicia en el momento en que dejamos de disfrutar de la vida en el aquí y ahora.
Nuestra cultura humana se basa en el consumismo, las comparaciones y el reconocimiento, ninguno de esos factores son negativos si se ejercen en la justa medida pues está claro que necesitamos consumir ciertas cosas para vivir y satisfacer necesidades, todo el tiempo comparamos situaciones para poder tomar buenas decisiones y a su vez el reconocimiento es algo que nos nutre cuando aportamos algo de valor a nosotros mismos y a los demás.
El problema comienza cuando depositas tu satisfacción y felicidad en cosas ajenas a ti mismo, ya sea comparándote con los demás para medir cierto "valor" personal, necesitando cosas materiales para darte cierto status o necesitando tener el aprecio y reconocimiento ajeno para poder sentir que "eres alguien en la vida".
No se trata de sentirse culpable por tener esas sensaciones que todos tenemos a veces pues nuestra propia naturaleza mamífera nos ha heredado esas características que en su momento se traducían en sobrevivencia, se trata de tomar consciencia para que dejen de controlarte.
La propuesta es llegar a comprender que el depender de cosas y opiniones externas para sentirte satisfecho o feliz es ser esclavo de las mismas y si no logras ese momento idealizado en tu mente puedes llegar a vivir siempre frustrado.
Cuando logramos objetivos nuestro cerebro produce sustancias que nos hacen sentir felices sin embargo son por tiempos cortos, después necesitaras más y volverás a tener que perseguir más escenarios ideales para sentirte feliz y si no tomas consciencia de esto te encontrarás siempre persiguiendo algo, nunca duradero, nunca satisfecho.
Jim Carrey decía: "Ojalá que todo el mundo logre ser rico y famoso y que logren todo lo que sueñan para que se den cuenta que esa no es la solución"
¿Cuál es la solución?
Estoy convencido que la respuesta a casi todos los problemas emocionales que tenemos es el amor propio.
Algunos confunden eso con la arrogancia la cual realmente es falta de autoestima expresada en la polaridad activa (alguien sumiso que se infravalora es la polaridad pasiva).
El amor propio es aceptarte a ti mismo como eres, asimilar tu individualidad única teniendo en cuenta que también formas parte de un todo, al aceptarte cómo eres te vuelves una persona auténtica y esto te abre la puerta a manifestar tus habilidades abiertamente sin necesidad de aplausos ni aprobación y esto se traduce en libertad; no necesitas escenarios ideales para ser feliz porque al ser tu pleno ya eres feliz simplemente por ser tú, es sentirte bien dentro de tu piel amando tu esencia, el reconocimiento y la riqueza puede llegar o no pero ya no dependes de eso para sentirte bien contigo mismo y ese amor propio se traduce en lo que haces y en tu trato a los demás y eso no puede más que sembrar plenitud.
Aprender a valorar lo que se tiene en este momento dejando de idealizar otros escenarios, si estuvieras en esos otros estarías idealizando este otro y al darte cuenta de lo que tienes en este momento y valorarlo te impulsa para seguir creciendo dejando de sentirte frustrado por no haber tomado otra decisión o vivir en ese otro escenario.
La vida es realmente muy corta el disfrutar de la vida es algo que se aprende y al principio puede costar trabajo pues hay que crear nuevos caminos neuronales para reemplazar los viejos, pero como todo musculo con la practica cada vez te será más fácil hasta que se vuelva una inercia el poder estar feliz en el aquí y en el ahora.
Por Eduardo Cid